top of page

Pablo Secada / La tremenda vergüenza

Foto del escritor: Análisis EfectivoAnálisis Efectivo

Anoche fuimos a La Noche a ver a Laguna Pai. Es la primera vez que hacemos algo así tras la pandemia. Dos años y medio de experiencias no vividas por el virus y su pésima contención.


Eso no es nada, por supuesto, frente a los más de cuatro Estadios Nacionales de “exceso de muertos” por la peor contención de la pandemia más mortal del mundo.


Hace meses visite a los dirigentes populares que son mis amigos. En VMT Rosa Jiménez me señaló las casas de los vecinos que se habían ido.


Sentí una tremenda vergüenza. De cierta manera los dejamos morir.


Me constan los esfuerzos de tantos: servidoras públicas, empresarios y dirigentes populares.


Mujeres admirables con décadas de experiencia se quebraron en el teléfono por la impotencia, más de una vez. Las Súper Poderosas no pudieron. Vizcarra paró todo y la embarró para robar.


Para robarle la vida a tantos.


La desgracia que vivimos no se entiende sin entender lo que pasó. Se terminó de romper el tejido social. Recién se va rehaciendo.


Se trató entonces. Se trata ahora. No se coordina. Prevalecen intereses particulares.

Trataremos de otra forma. Al menos eso hacemos.


5 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comentários


bottom of page