top of page
Foto del escritorAnálisis Efectivo

Martín González / La iliad@ y la odise@ 2023


Ante mis despistados ojos y profunda ansiedad corporal testificó la presencia de Stanley Kubrick en esta misma habitación, parece tan surrealista que sería bello suponer que se trata de un subcapítulo perdido y nunca revelado de 2001: Odisea del Espacio.


Como si esto fuera consecuencia de un desdoblamiento astral (Tyrrell, 1879-1952) voy por detrás de él, tratando de comprender y de recuperar las piezas del rompecabezas en que está convertido el sustanciado hombre en este siglo XXI. La rápida y centrifuga concentración de acontecimientos exo terrestres sin duda nos ubica en la etapa más dramática de la existencia de la humanidad en este planeta. El mundo asiste como en un estado de trance producido por los efectos de una fuerte droga somnífera al siguiente acontecimiento cósmico, y que al igual que los anteriores, no tenemos la certeza o capacidad de prever o asegurar cuales habrán de ser las reales consecuencia que esto provocara en la continuidad de los seres humanos en el planeta tierra o en el universo.


Estaba contentísimo, al punto de la excitación porque al fin volvíamos a la luna (si es que alguna vez se fue ahí), la misión Artemis (NASA) está ya consolidada en el interior de mi mente, sujeta a cada información, video, stock, publicación o anuncio en las redes y en las páginas oficiales del proyecto que llevará al hombre de nuevo a la Luna, y donde como punto épico central se construirá la primera base permanente de la humanidad en suelo firme no terrestre.


Y de pronto, frente a mis ojos como llevado de la mano por el propio Kubrick aparece Yusaku Maezawa. Mis fascinaciones, fobias, anhelos, aspiraciones, metáforas de vida y el aire se vieron estremecidos hasta el punto de quedar extenuado y profundamente conmocionado. En tan solo un año más, es decir para 2023 se realizará el primer viaje a la Luna por parte de civiles (terrestres), sin la cooperación de las grandes agencias del espacio, según lo anunciado por SpaceX. Y eso lo cambia todo, el despegue de esta Iliad@ y Odise@ 2023 como si se tratara de un nuevo poema que narra el rapto de Helena, y donde los Cohetes Falcon ahora se convierten en los caballos de Troya del espacio.


El espíritu humano indescriptible en su energía interna nos hace estar conscientes de nuestra propia existencia en este universo, y nos lleva a los rincones más profundos de la mente y de los sueños con los cuales construimos las tribulaciones más dramáticas y nos esforzamos tanto por realizar grandes hazañas del amor, que hoy vamos de la mano con la certeza de cumplir la famosa frase de Konstantín Tsiolkovski:


“La Tierra es la cuna de la humanidad, pero no se puede vivir en la cuna para siempre” ...

Dos aspectos sobresalen de la obra homérica. En primer lugar, la historia del caballo de Troya (cohetes Falcon). Los griegos (SpaceX) hacen creer a los troyanos (NASA) que se han retirado y que han dejado la escultura como ofrenda a los dioses. Dentro de éste, sin embargo, se esconden soldados griegos. Los troyanos llevan el caballo dentro de la ciudad, y en la noche, cuando la mayoría están borrachos, aquellos salen, abren las puertas de la ciudad y permiten el ingreso del resto del ejército griego, que mata a la mayoría de los troyanos y arrasa la ciudad. Hoy conquistan la Luna.


Lo que no me deja dormir en esta madrugada es saber quién es Aquiles y dónde está realmente París. Ya nadie puede evitar que la grandeza de la obra Homérica se siga representando con la conquista espacial. El lago Estigia ha quedado atrás, el rumbo está puesto en la nueva carrera de negocios energéticos, minerales y espaciales.


Por cierto, estimado soñador argonáutico ¿Por qué se empleó al PeruSAT-1 en trabajos de inteligencia de bioseguridad durante la pandemia Covid-19? Actualmente, según datos oficiales suman más de 26 mil escenas que el PerúSAT-1 que fueron captadas en marco de las estrategias de gestión de riesgo, y otras 11,727 escenas en defensa y seguridad nacional en clara vulneración de los derechos públicos de los peruanos.


Pero esa es otra historia, por ahora dejaremos claro que lo que realmente importa es que la Agencia Espacial Europea (ESA), se asocia con la relojera suiza Omega para crear, desarrollar y vender relojitos por la módica cantidad de 6,000 mil dólares que marcan simultáneamente la hora en la Tierra y en el planeta rojo, Marte (ya están a la venta, por si le interesa estimado lector).


Homero y SpaceX nos revelan al igual que las iniciativas civiles de conquista del espacio que los individuos nos enfrentamos diariamente a las incógnitas de lo que significa ser humanos, y en todas las veces dando cara a un destino incierto.


La angustia, el desamparo, la duda, y también el arrojo para tomar decisiones difíciles y soportar sus consecuencias, son parte de nuestras vidas sin duda, aunque en ellas figuran como protagonistas efímeras pero reales las alegrías.


Posdata: Ya llegó el otoño a Europa, y hay que pagar la factura del gas.


17 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page