Mientras el mundo sigue su marcha a un Nuevo Orden Mundial, acá en el Perú seguimos en un Nuevo Conflicto político, social, económico y mental. ¿Qué manera de no querer abrir los ojos al mundo en que estamos y se nos viene?
Empecemos por el principio, para todos los elegidos en elecciones libres cada periodo de tiempo, en una sociedad democrática, es bueno que internalicen: “que son elegidos para lograr la felicidad del pueblo y el progreso y orgullo de la Nación”. Entonces, ¿por qué no lo hacen? Algunas ideas, para reflexionar, ojalá puedan serles de utilidad.
Pensar en poder liberar y desarrollar las fuerzas productivas, para el desarrollo y prosperidad común, haciendo un propio camino acorde a nuestras peculiaridades, para mejorar la calidad de vida de nuestra población, exige lograr el máximo crecimiento económico sostenidamente, en este mundo de innovación y desarrollo tecnológico continuo. Y para ello, hay que priorizar al pueblo, ofreciéndole una sociedad más igual y más justa, para lo cual hay que construir los mejores sistemas de seguridad social y educación. Con una sociedad saludable y educada, podremos contribuir al progreso y a la paz mundial.
Vivimos una nueva realidad. El COVID nos cambió rápidamente a un entorno tecnológico, que ha acelerado la transformación digital y modo de vida, mediante el teletrabajo, la educación en línea, la telemedicina, el crecimiento del comercio electrónico, entre otros, afectando a organizaciones de todos los tamaños y sectores. El mundo de hoy es innovación, tecnología, deseo de lo natural, y el uso de pensamientos elaborados, propios de la economía del conocimiento. Entonces, lo que hay que hacer, es ir en esta dirección.
La pésima educación, la mala salud, un sistema judicial que deja mucho que desear, la falta de infraestructura, enormes brechas sociales, la informalidad, y la enorme corrupción (Contraloría detectó 438 empresas con responsabilidad penal por corrupción entre el 2018 y el 2021), nos han llevado a una baja productividad, que debemos corregir para lograr mejorar nuestra competitividad. Y para ello, debemos de dar un clima político que construya, que fomente un clima favorable a la atracción de inversiones, con estricto respeto a las leyes y cumplimiento de las mismas, en forma estable y continua.
Por lo anterior me pareció oportuna la declaración ayer del presidente Castillo, de invitar a invertir en el Perú. No hay forma de eliminar la pobreza, sino es que no generas riqueza. Y bien también, por comunicar los lineamientos que seguirá su Gobierno como parte de su política general en el periodo 2021-2026. Los diez ejes que plantea el Gobierno son los siguientes: 1. Generación de bienestar y protección social con seguridad alimentaria 2. Reactivación económica y de actividades productivas con desarrollo agrario y rural 3. Impulso de la ciencia, tecnología e innovación 4. Fortalecimiento del sistema educativo y recuperación de los aprendizajes 5. Descentralización, fortalecimiento institucional y del servicio civil. 6. Fortalecimiento del sistema democrático, seguridad ciudadana y lucha contra la corrupción, narcotráfico y terrorismo. 7. Gestión eficiente de riesgos y amenazas a los derechos de las personas y su entorno 8. Gobierno y transformación digital con equidad 9. Conducción de una diplomacia nacional, autónoma, democrática, social y descentralizada 10. Estado Intercultural para la promoción de la diversidad cultural.
Sabiendo dónde vamos, despejamos la incertidumbre de no saber adónde se va. Conociendo la cancha, se desarrollan las estrategias. Los ejes me parecen cubren un amplio espectro, bastante integral. Le añadiría uno por encima de todos, VALORES.
Yorumlar