E. Cooperación Internacional
Resalta la Iniciativa Mano de la mano (IMM) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que favorece la ejecución de programas ambiciosos dirigidos por los países para acelerar la transformación de los sistemas agroalimentarios erradicando la pobreza (ODS 1), poniendo fin al hambre y la malnutrición (ODS 2) y reduciendo las desigualdades (ODS 10). Emplea análisis y modelos geoespaciales avanzados, así como un enfoque consistente en el establecimiento de alianzas sólidas, para acelerar la transformación de los sistemas agroalimentarios basada en el mercado, con el fin de aumentar los ingresos, mejorar el estado nutricional y el bienestar de las poblaciones pobres y vulnerables y reforzar la resiliencia al cambio climático.
La Iniciativa da prioridad a los países y territorios en los que la pobreza y el hambre son más acentuados, las capacidades nacionales están limitadas o las dificultades operativas son más grandes debido a crisis de origen natural o humano. Las áreas de intervención han sido el desarrollo de cadenas de valor para productos básicos prioritarios, la construcción de agroindustrias y sistemas eficientes de gestión del agua, la introducción de servicios digitales y la agricultura de precisión, la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos y la lucha contra los desafíos derivados del cambio climático y los riesgos asociados a la meteorología.
La IMM, puesta en marcha en 2019, es uno de los mejores exponentes de la FAO y una de sus principales esferas programáticas prioritarias, que procura:
a. Asegurar el desarrollo sostenible
La IMM aporta análisis integrados que identifican interacciones clave, sinergias y compensaciones recíprocas entre acciones dirigidas a acelerar el crecimiento económico, asegurar la inclusión social y fomentar el uso sostenible de la biodiversidad y los recursos naturales.
b. Focalización en la pobreza y el hambre
La IMM está orientada a las personas más pobres de entre los pobres, en los países más vulnerables, de bajos ingresos y bajas capacidades, para desbloquear todo el potencial de la agricultura.
c. Un enfoque territorial
La IMM emplea datos geoespaciales, biofísicos y socioeconómicos, así como análisis avanzados, para averiguar los territorios en los que la transformación agrícola y la gestión sostenible de los bosques y la pesca pueden contribuir en mayor medida a paliar la pobreza y el hambre.
d. Establecimiento de alianzas sólidas
Facilita la labor de los gobiernos de establecer contactos con donantes y asociados en el desarrollo para conseguir apoyo y aplicar estrategias agrícolas y planes de inversión nacionales.
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