El Fujimorismo, sin Fujimori y el panorama político
¿Quién está en condiciones de canalizar, lo dejado por don Alberto?
Fuerza Popular, de ninguna manera. Hernando de Soto, reconocido por sus aportes intelectuales, pero tiene que demostrar firmeza y decisión para enfrentar los grandes problemas del país. López Aliaga, un bonachón personaje haciendo gala de millonario pero que no calza con los sectores populares y rurales y aupando alianzas con personajes de oscuro pasado político. Los de izquierda perdieron hace tiempo con Barrantes su oportunidad, prefirieron vivir en el fraccionamiento y de lanzadores de piedras a todos los techos de los gobiernos que se presentaran. Muchos voltearon la mirada y hasta expresaron simpatía por el ingeniero Añaños, quien luego de un fugaz aparecer terminó como dicen en el campo “quien con ropa ajena se viste, en la calle queda desnudo”, o “ceguera y sordera, son malos consejeros políticos”. El Perú sigue a la búsqueda de un LIDER, ¿lo encontrará? Esa es la pregunta del millón.
La aparición de una postura radical
Con todo el desgobierno, que representa doña Dina Boluarte, el pueblo se siente desprotegido, la situación económica va para peor, la corrupción ha calado hondo en todos los niveles del Estado – Gobierno. En estas condiciones el riesgo es latente, que el pueblo en su desesperación vote por una postura radical[1], que le plantee el fusilamiento de los corruptos, de los delincuentes extorsionadores, acompañado de algunas promesas populistas e irrealizables, relacionadas con los programas asistencialistas que ya existen. Este pueblo peruano es impredecible, con un electorado mayoritario, que tiene por costumbre decidir su voto cuando se encuentra, haciendo la cola para votar o en la cabina de votación.
Ante este riesgo debemos trabajar una alternativa distinta, que se enmarque dentro de los principios del sistema democrático.
Características del perfil del futuro gobernante
¿Cuál sería el perfil, del Gobernante que quiere el pueblo peruano? El gobernante debe reunir, varias de estas características:
- El pueblo diríamos en general, está esperando, un gobernante con decisión para hacer frente a la corrupción y la inseguridad ciudadana. Anhelan un gobernante, que enfrente la corrupción enquistada en todos los niveles del Estado. Que pase de la identificación y denuncia, a la acción, que no es más que castigar con todo el peso de la Ley y en forma oportuna, porque se lo merecen.
- Aceptaría con mucho agrado, un gobernante que lidere un equipo capaz de escucharlos, que se les acerquen y que los haga sentir empoderados porque los entienden y hacen suya la problemática que viven.
- Un gobernante que les devuelva la seguridad para transitar en las calles y les asegure la tranquilidad en la casa y en su centro de trabajo.
- Un gobernante con planes, para enfrentar y superar la pobreza y la extrema pobreza, que se hace sentir en millones de hogares peruanos. Un gobernante que se proponga superar las brechas existentes en salud, vivienda, agricultura, transporte.
- Un gobernante que afirme la fe en el sistema democrático, y que sientan que la democracia, brinda oportunidades para todos.
- Un gobernante pro activo y comunicador, que les indique la ruta por la que se tiene que transitar y asigne las responsabilidades que corresponde a cada sector que conforman el Perú.
- Un gobernante que restañe las heridas que nos dividen y, sea capaz de lograr la reconciliación, porque el Perú está fraccionado y enfrentado. Que siente las bases y se faje por la unidad de todos los peruanos.
[1] en el partidor están aquellos que asumen posturas violentistas prometiendo un retroceso al Perú o reviviendo recuerdos de gobiernos corruptos y nacionalistas; otros exhibirán su pensamiento humanista y otros apelarán a frases como trabajadores y emprendedores, etc. Todos estos tienen en común la toma del poder para instaurar un gobierno socio – comunista y los otros llegar al poder para saquear sus recursos. Avisados estamos.
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