Fortalecimiento de la asociatividad de los agricultores
¿QUÉ HACER?
La asociatividad. El trabajo conjunto es fundamental para la consolidación y crecimiento del productor agrario.
La asociatividad trae beneficios; permite comprar a menor precio, incrementar los ingresos de los productores, mejorando el poder de negociación con los compradores, acceso a financiamiento, incrementa los activos familiares y cooperativos, incursionan en cultivos de alta rentabilidad, con precios más predecibles, capacitación, acceso a nuevos mercados entre otros. Los ejemplos que tenemos en el país son: Las cooperativas de café, cacao, banano y mango orgánico, cereales andinos, palto, entre otros, representan el 15 % de la oferta exportable, esto equivale a más de 1,250 millones de dólares al año, que ingresan a la economía de estas familias.
Para que la asociatividad tenga éxito, se requiere planificar la continuidad en las estrategias y desarrollar esfuerzos de articulación interinstitucional con una participación activa y permanente del MIDAGRI de forma descentralizada.
Hay que efectuar un análisis de las potencialidades de los mercados, articulando con los gobiernos locales y regionales. Para facilitar procesos de asociatividad se requiere, generar confianza macroeconómica y legal evidenciando los beneficios individuales y colectivos como desde pequeñas unidades agrarias se puede aprovechar las economías de escala, fortaleciendo capacidades y habilidades de cooperación, empresariales y de gestión de las cadenas de valor. Esto requiere de una política y voluntades de los actores, expresados en inversiones de mediano a largo plazo, son iniciativas que requieren de constante acompañamiento con métodos de asesoría y capacitación permanente de mediano y largo plazo por parte del Gobierno Central y Regional.
Las formas de asociatividad son: sociedad anónima es lucrativa puede ser cerrada o abierta, asociación para vender y cooperativas.
Comments