Antecedentes Nunca un evento generó tanto daño como el COVID-19. Ni las guerras mundiales (1914-1918 o 1939-1945), ni las grandes crisis económicas (1929, 1973 o 2008), ni las enfermedades más letales (gripe porcina o asiática, o influenza de 1918). El COVID-19 ha sido repentino y de fácil trasmisión, pues desde el primer caso se llegará al millón de contagiados antes de 100 días y en un total de 199 países. El COVID-19, también, ha sido combatido con algunas medidas eficaces, como paralización de actividades, cuarentena o aislamiento, y cierre de fronteras; medidas todas que afectan severamente el desenvolvimiento del turismo. En el mundo: Los países más ricos, más turísticos y más contagiados Entre los más contagiados, tenemos a USA, Italia, China, España, Alemania y Francia, que casi coinciden con los países más ricos (USA, China, Alemania, y más atrás Francia, Italia y España). Además, salvo Alemania (9º en el turismo mundial), los cinco primeros países son Francia, España, USA, China e Italia. Este año, el mundo puede perder US$ 50,000 millones en visitas y US$ 113,000 en vuelos; y la industria global puede perder 50 millones de empleos. Se afectó los calendarios de fútbol (ligas, Champions y Libertadores, Eurocopa y Copa América), fórmula 1 (primeros circuitos), básquetbol (final de temporada en la NBA), tenis ATP (temporada europea) y hasta los Juegos Olímpicos de Tokio. En el Perú: ¿Qué puede pasar con el turismo? En el Perú, se presentaría una caída de 15% en el Turismo para el 2020, aunque esto variaría en función de la duración de la pandemia y de la implementación de un plan de promoción inmediatamente posterior al final de las restricciones. Adicionalmente a las pérdidas de los operadores directos, debemos considerar aquellas de actividades conexas como transporte, restaurantes, entretenimiento, ropa o artesanía, que además se efectúan en forma descentralizada. Suficiente liquidez. Para no paralizar la actividad y mantener el empleo, se requiere liquidez; por ejemplo, créditos blandos y aplazamientos de obligaciones tributarias, financieras (por inversiones en capital fijo o de trabajo) y de servicios. Variadas promociones. Por un lado, se requiere iniciar con precios bajos, luego empaquetar destinos o servicios (alojamiento y transporte), agregar negocios (convenciones o visitas virtuales) o servicios (souvenirs o productos de la zona).
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